En este proyecto nos ocupamos en escuchar las necesidades de Emma, una mujer muy dinámica y creativa.
Su ático necesitaba un cambio, aprovechar la luz solar y lucir cada uno de sus rincones. Adaptamos cada espacio para cada diferente actividad diaria de Emma, desde hacer deporte, trabajar y poder compartir con amistades y familia un piso con tanto potencial.
Sabemos que actualmente está muy de moda abrir la cocina al salón y comedor haciendo un espacio más diáfano, nuestra clienta no veía esta opción como una posibilidad, así que, buscamos otras soluciones para que las distintas zonas de la casa que se mostraban oscuras tuvieran armonía con su personalidad y entorno.
Derribamos un muro del salón al pasillo, el cual impedía el paso de la luz, conseguimos el doble de espacio visual y profundidad. El comedor ha quedado frente a la cocina y unido al salón, con una mezcla decorativa con maderas, colores fuertes como el azul petróleo en mobiliario y tramos de paredes, combinados con un toque sofisticado que ofrece la selección de una lámpara estilo Midcentury de ixia.es.